CAMINOS DE LIBERTAD

RUTAS EN BTT POR LA SIERRA DE L'ALBERA

Crónica escrita por DAVID GUIU y OLGA ROVIRA publicada en la revista MUNTANYA número 903

Tres itinerarios para recorrer el Alt Empordà con BTT
a través de históricos caminos de montaña
que fueron verdaderas redes de evasión de exiliados
durante la Segona Guerra Mundial.

La expansión del nazismo en toda Europa en 1940 provocó que mucha gente fuera perseguida por los aparatos represores de este régimen totalitario. Con este panorama fueron muchas las personas que decidieron evadirse hacia países más seguros o bien ir a Inglaterra para unirse a las fuerzas aliadas. Normalmente, el recorrido era desde el centro de Europa, bajar hacia los Pirineos para cruzarlos y encaminarse hacia Portugal o Gibraltar. Este movimiento, de casi 80.000 personas, contó con el apoyo de las redes de evasión organizadas a partir de la estructura aliada que ayudaban a escapar a los perseguidos del nazismo. La Albera, en el Alt Empordà, fue un lugar, gracias a la orografía menos abrupta que el resto del Pirineo, por donde pasaron algunas de estas redes de evasión.
Entrando en el antiguo monasterio de Sant Quirc de Colera

LA SIERRA DE LA ALBERA

La Sierra de la Albera se sitúa en el noreste de Cataluña. Es, por tanto, la parte más oriental del Pirineo catalán, que en esta parte de cordillera va cayendo suavemente hacia el Mediterráneo y que tiene una altura máxima que apenas supera los 1.200 m con el monte Neulós. Climáticamente, destacan dos partes bastante diferenciadas. Al este está la parte más mediterránea y, en cambio, al oeste encontramos vegetación más húmeda, propia del centro de Europa, con la presencia de robles y hayas. Probablemente, el elemento más destacado del clima de esta sierra es el viento fuerte del norte, la tramuntana. Además, hay que decir que por las temperaturas que se registran, las mejores estaciones para ir a pedalear son la primavera, otoño y, en menor medida, el invierno; en verano hay que evitar los días de más calor. Este trabajo pretende recorrer en BTT buena parte de los pasos más significativos de estas redes.
Arriba del Coll de Rumpisó, con Portbou al fondo

EL CASO DE WALTER BENJAMIN

Walter Benjamín huyó desde París hacia el sur, cuando el nazismo se extendió por buena parte de Europa, especialmente con la capitulación de Francia. En su caso tuvo que usar un paso más discreto, ya que estaba fuertemente perseguido por su condición de judío y marxista. El filósofo conocía a Hans Fittko, el hombre de Lisa Fittko, del campo de concentración de Vernuche. Este conocimiento le permitió ir a encontrar a Lisa en Portvendres, donde residía. Allí un 25 de septiembre de 1940 le pidió, a pesar de su delicado estado de salud, cruzar la frontera con Cataluña. En aquellos momentos L. Fittko aún no había hecho nunca de pasadora y tan sólo tenía las indicaciones, plasmadas en un croquis, del alcalde socialista de Banyuls, el señor Azema. Por consejo del alcalde, el día antes de la fuga fue a hacer una primera inspección, junto con los evadidos, para valorar la dificultad del camino. Cuando fue el momento de volver, Benjamín, que en todo momento custodiaba un maletín donde se cree que llevaba su último manuscrito, decidió que pasaría allí la noche porque no se veía con fuerzas de bajar y volver a subir al día siguiente. Cuando el grupo volvió a buscarlo, para terminar de cruzar la frontera, lo primero que vio Fittko fueron los ojos de Benjamín rodeados de un color rojizo que espantó mucho a la pasadora; por suerte sólo fue el desteñido de las gafas del filósofo provocado por la humedad de la noche. Una vez en Portbou, Benjamín se enteró que el gobierno español lo quería volver a Francia, lo que le llevó a suicidarse. Extrañezas del destino hicieron que las dos personas que le acompañaban, también condenadas a ser devueltas a Francia, pudieron salvar la vida, ya que en 24 horas cambiaron las disposiciones que regulaban el tráfico fronterizo. Probablemente si no se hubiera suicidado, Benjamín habría podido salir hacia algún país más seguro.

ITINERARIO 1

PORTBOU – COLL DE RUMPISÓ

Ruta sin mucho desnivel acumulado, pero con algunos tramos muy físicos como pueden ser las rampas iniciales, en las afueras de Portbou. El premio lo tendremos en el collado, donde está el panel conmemorativo del filósofo alemán marxista Walter Benjamín, ya que se puede disfrutar de unas generosas panorámicas de la sierra de la Albera y del mar Mediterráneo.
Distancia: 19 km
Desnivel: 550 m
Dificultad: Mediana-Baja
Punto de inicio: Rambla de Catalunya, delante del mar, en el centro de Portbou
ITINERARIO: Desde delante del punto de información que hay junto a la playa subimos (O) por la Rambla de Cataluña en dirección al túnel, haciendo caso de las indicaciones hacia el Querroig. Superado el túnel, dejamos a la derecha el campo de fútbol. Al PK 2,8 remontamos fuerte a la izquierda hacia Querroig y 200 m después avanzamos por la pista principal haciendo la curva a la izquierda. En la siguiente bifurcación (PK 4,2) vamos a la derecha (marcas amarillas) y 300 m después, el collado (270 m), seguimos a la derecha dirección el Querroig. En el collado del Suro (PK 8,8) giramos a la derecha; en medio kilómetro logramos el collado de Rumpisó (530 m), donde hay una placa conmemorativa dedicada a Walter Benjamín. En este punto podemos dejar las bicis y subir, en 5 minutos, hasta la cima del Querroig. Para el regreso recuperamos las bicis y deshacemos camino hasta Portbou.

 

ITINERARIO 2

ESPOLLA – COLL DE BANYULS – SANT QUIRC DE COLERA – RABÓS

Ruta cómoda tanto física como técnicamente. El ascenso hasta el collado de Banyuls lo haremos en buena parte por asfalto. Desde el collado desharemos camino y luego afrontaremos la remontada más importante de la jornada hasta el collado de la Plaja, con rampas que superan el 12%; el descenso hasta Sant Quirze de Còlera es de la misma intensidad. La ruta vuelve a calmarse a partir de San Quirc y casi hasta Espolla, ya que transitaremos por pistas en buen estado y con escasas subidas.
Distancia: 27 km
Desnivel: 650 m
Dificultad: Baja
Punto de inicio: Espolla, justo pasado el puente sobre una torrentera, un poco más adelante del PK 0 y de la GI-603
ITINERARIO: Salimos en dirección al puente, pero antes de cruzarlo subimos a la derecha (c/ San Climent). Al final de esta calle giramos a la derecha y avanzamos por la c/ dels Pedrissos, ahora en suave descenso. Cuando llegamos a la calle de Banyuls (PK 0,4) giramos a la izquierda, en dirección Banyuls sur Mer; 200 m después vamos a la derecha en dirección al Coll de Banyuls, en bajada asfaltada (PR). Abandonamos el asfalto (PK 1,8) y tomamos el camino de la izquierda cementado, en subida. 100 m después seguimos recto por camino estrecho. Al PK 3,3 llegamos al asfalto nuevo y lo tomamos a la izquierda para seguirlo durante 7 km, hasta llegar al Coll de Banyuls (350 m). Desde el cuello deshacemos camino hasta el PK 11,3 (240 m), donde abandonamos la carretera y giramos a la izquierda; pronto nos tocará subir, y duro. En el collado de la Plaja (PK 14,2 / 385 m) iniciamos el descenso siempre por la pista principal hasta Sant Quirze de Còlera, el cual sirvió de punto de apoyo a los exiliados republicanos que marchaban por el collado de Banyuls. Entramos en Sant Quirze de Còlera (PK 16,5) y posteriormente seguimos la misma dirección que llevábamos hacia Rabós. Esta parte de descenso hasta Rabós se hace por buena pista en suave descenso y con un buen trozo de asfalto a partir del PK 17,1. Al PK 22,5 llegamos a un cruce y giramos a la derecha hacia Rabós; 400 m después giramos a la derecha, cruzamos el puente y entramos en el pueblo por la c/ del Pont. Después continuamos el c/ Banyuls sur Mer y, a continuación, subimos por la c/ de Colliure hasta la plaza del Pou Nou; salimos del pueblo, manteniendo la dirección, por una subida asfaltada. Al PK 23,6 (110 m): seguimos recto por el camino cementado, haciendo caso de las marcas amarillas que nos acompañarán hasta Espolla; 1 km después, en la trifurcación, tomamos la pista no asfaltada de la izquierda dirección a Espolla. Al PK 25,4 seguimos la bajada por la pista principal haciendo la curva a la izquierda y 250 metros después giramos a la izquierda por terreno cementado y en breve descenso. En pocos metros llegamos al pueblo y volvemos al punto de inicio.
A punto de entrar en Rabós

EL FRONT NACIONAL

El Front Nacional de Cataluña (FNC) se creó en 1940 fruto de la confluencia de militantes de organizaciones como Estat Català, Nosaltres Sols, Partito Nacionalista y la Federació Nacional d’Estudiants de Catalunya. En este periodo el FNC colaboró ​​con los aliados en diversos ámbitos, de los cuales podemos destacar la evasión de aviadores americanos e ingleses abatidos en Francia; los judíos perseguidos por el nazismo, y también de combatientes polacos. En total ayudaron a cruzar a unas 800 personas, sobre todo por la zona del collado de Banyuls. El objetivo del FNC era que la victoria aliada tuviera réditos políticos para la liberación de Cataluña. Los evadidos que una vez en territorio catalán eran detenidos por las autoridades franquistas, eran trasladados a la cárcel de Figueres. Este es el caso del resistente francés Maurice de Cheveigné, el cual estando en París (1940) huyó del nazismo porque no quería aceptar el orden totalitario y llegó a Cataluña por el collado de Banyuls con la intención de sumarse al bando aliado, vía Londres. Poco después de entrar en Cataluña fue detenido en Vilamaniscle, donde fue encerrado en un improvisado calabozo antes de ser trasladado a la prisión de Figueres en autobús. Lo más cómico del caso es que las autoridades españolas le cobraron el billete del autobús.

ITINERARIO 3

CANTALLOPS – REQUESENS – SANTA MARIA DE L’ALBERA – COLL PREGON – CASTELL DE REQUESENS

El recorrido se inicia con una subida por buena pista hasta Requesens, donde encontraremos un bar restaurante. A partir de este punto el ascenso es más exigente debido al incremento del desnivel y del estado de la pista. También gana en espectacularidad gracias a la ubicación del camino, ganado en la roca de la montaña. Cuando enlazamos con la D-71 volvemos a ganar desnivel con celeridad hasta superar, por la vertiente norte, el Puig Neulós. Cuando ya tengamos la cima detrás nuestro tendremos que estar muy atentos porque tenemos que dejar la pista principal y enlazar con un sendero a la altura del coll Pregon. El sendero se va transformando en una divertida pista de descenso que nos llevará hasta el castillo de Requesens desde donde desharemos camino hasta Cantallops.
Distancia: 42,3 km
Desnivel: 1.200 m
Dificultad: Mediana
Punto de inicio: Cantallops, en la plaza que hay entre la c/ Soles y la c/ de Sant Climent, donde hay una fuente.
ITINERARIO: Desde la plaza, tomamos dirección norte hacia Requesens por la calle del mismo nombre. Medio kilómetro después, en la bifurcación, seguimos por la pista principal a la derecha en dirección al castillo de Requesens. Siempre vamos subiendo por la pista principal. Cuando llevamos 5,5 km vamos a la izquierda en dirección al pueblo de Requesens (a la derecha es por donde volveremos), donde llegaremos al PK 6,8 (520 m); antes del parking, tomamos una pista a la derecha claramente en peor estado y subimos siguiendo marcas de GR; el PK 7 hacemos la bifurcación a la izquierda (GR). En el cuello del Auleda (PK 11,2 / 710 m) seguimos la única pista con PR (hemos abandonado el GR), aunque más adelante también lo dejaremos; ahora tenemos un tramo de descenso. En el cuello del Plan del Arca (PK 15/595 m) vamos a la derecha dirección cuello del Ullat; debemos superar una valla que evita el paso de vehículos motorizados. Una vez llegamos a iris de la Albera (PK 18,6 / 625 m) superamos una masía, una fuente y pronto estamos en la D-71A, que tomamos a la derecha en subida, en dirección al cuello del Ullat , siempre cómodamente por el asfalto. Al PK 23,7 (930 m) estamos en el citado cuello y avanzamos recto entre bosque, dejando el refugio a nuestra derecha, siempre por la pista principal. Más adelante superamos un área de picnic a la izquierda. Al PK 25,3 (1.055 m) abandonamos el asfalto. Nosotros avanzamos por la pista de la izquierda para flanquear el monte Neulós por la cara norte. Siempre transitamos por la pista principal con alguna marca amarilla. Cuando estamos en el PK 29 (990 m) hay que tener cuidado, ya que abandonamos la pista en plena bajada y vamos a la derecha por medio de un bosque poco frondoso, en dirección al cuello que vemos muy cerca, sin camino ni sendero definido; por tanto, arrastrando la BTT. Son unos 100 m de distancia para remontar unos 20 m de desnivel y llegar al cuello Hondo. Alcanzado este cuello encontraremos marcas de GR que ignoraremos; nosotros tenemos que tomar un sendero bien definido que baja dirección suroeste (hay un poste que indica el principio). Este sendero tiene una primera rampa de marcado desnivel; posteriormente ganando en presencia de piedra suelta, pero se puede hacer todo encima de la BTT. El tramo más complicado tiene poca longitud y el sendero pronto se transforma en pista. Al PK 30,6 hacemos la bifurcación a la derecha (a partir de ahora iremos encontrando marcas amarillas con frecuencia). 5 km después llegamos a una nueva pista y la tomamos a la derecha para subir al castillo. Tras visitarlo (485 m) volveremos al punto anterior y seguiremos recto. Delante de la iglesia vieja, en el PK 36,3, continuaremos por la pista principal y medio kilómetro después llegamos a una nueva pista; la tomamos a la derecha en bajada en dirección a Cantallops. Pasado el barranco vamos a la izquierda en dirección Cantallops (5 km), ya por terreno conocido.
Subiendo haciendo el Puig Neulós, con vistas al Canigó
El castillo de Requesens

PEP’S LINE

En esta zona trabajó durante mucho tiempo la red de evasión llamada Pep ‘s Line. Su nombre proviene de Josep Rovira, un militante del POUM y jefe de la 29 división republicana durante la guerra civil española, que actuaba con el apodo de «Martín». Dentro de la estructura británica de la cadena llamada Vic o Vic-Martín, que dependía de Special Operations Executive (SOE). El nacimiento de la red se produjo cuando Victor Gerson (alias «René Jeanson»), un agente de los servicios de información ingleses, quería devolver a Inglaterra después de haber sido lanzado en paracaídas en Francia con el fin de llevar a cabo una misión. Junto con el abogado parisino André Meil-Curiel, que intentaba unirse a la causa gaullista y también quería llegar a Inglaterra, contactaron con Rovira y ambos fueron pasados en un par de días hasta el consulado británico en Barcelona y, posteriormente, llegaron a Gibraltar desde donde retornaron a Inglaterra. Los servicios británicos, todavía bastante desorganizados, se sorprendieron mucho del regreso de Victor Gerson al que se le propuso volver a Francia para organizar una red de evasión. A principios de 1942 un submarino dejó en la playa de AGAI al comandante Vic y posteriormente volvió a contactar con Josep Rovira para estabilizar una red de evasión. El principal objetivo de Rovira, y por extensión del POUM, era que esta ayuda pudiera repercutir positivamente en España con la victoria de los aliados y provocar una caída del régimen dictatorial de Franco. La finalidad de la red se centró a evacuar miembros de la resistencia, agentes secretos, aviadores aliados, paracaidistas, etc. Esta cadena se mostró especialmente activa en la zona norte de Espolla. Procedentes de Lyon llegaban a Perpiñán en tren, desde donde cruzaban el Pirineo por la zona de la sierra de la Albera. En primer lugar pasaban por el castillo de Requesens, por lo que es lógico pensar que cruzaban por cuellos en torno al monte Neulós, para seguir posteriormente hacia Sant Climent Sescebes, Capmany, paso de Molins-Peralada, Cabanes, Vilatenim y finalmente Figueres. La cadena estuvo fuertemente perseguida por la Gestapo y por las autoridades francesas de Vichy, colaboracionistas del régimen nazi, hasta el extremo que el historiador y escritor Antoni Rovira i Virgili, exiliado en Perpiñán, fue detenido un par de veces siendo confundido por Josep Rovira. Además, la red estuvo a punto de caer el 11 de septiembre de 1943 debido a la infiltración de agentes nazis, pero la buena organización de la red, donde los distintos miembros tenían muy poco conocimiento de los otros, permitió que se pudiera reestructurar y seguir actuando. Así se calcula que trasladaron unos centenares de personas entre las que hay nombres tan destacados como Félix Gouin, que posteriormente fue primer ministro francés.

DAVID GUIU y OLGA ROVIRA

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